Hace siete años, la compañía biofarmacéutica norteamericana Medolife, que se dedica a la investigación y desarrollo de métodos alternativos y productos naturales para el tratamiento del cáncer, comenzó a investigar las propiedades del escorpión azul y sus efectos en el tratamiento de la enfermedad.
Lo hacían en Cuba, con una tecnología de polarización de líquidos que dio muy buenos resultados.
Enterados de que en República Dominicana existía el mismo de tipo de escorpiones y en gran cantidad, la compañía se instaló aquí hace dos años.